Una celebración conjunta de las maravillas de la naturaleza.
Un proyecto trazado a cuatro manos entre Nuria Val, cofundadora y directora creativa de ROWSE , y el interiorista Isern Serra. Situado en plena ciudad de Barcelona, este local industrial se ha transformado en un espacio abierto de creación y experimentación, un sincero reflejo de los valores de la firma de cosmética natural.
Diseñado para ubicar simultáneamente una oficina, un showroom y una galería de arte, logra con soltura su cometido. Es un lugar encantador que apetece visitar. Esencialmente mediterráneo, está inspirado en la arquitectura autóctona, donde el blanco puro impregna paredes, techos y suelos. Deliberadas notas de color se concentran en tres elementos: la gran pila de terracota de Robbie Whitehead e, insignia de Serra , el sofá de obra tapizado en terciopelo verde esmeralda y un precioso olivo integrado en la misma estructura.
“Siendo la luz natural uno de los sellos distintivos del estudio, hemos trabajado con Clara Quintana Studio y Santa & Cole para añadir un extra de calidez a través de la iluminación” (ROWSE).
La selección de luminarias acota y relaciona las distintas áreas del estudio. Acompañando el paso entre estancias, Nagoya, una pieza de discreta elegancia. A su vez, Tekiò da la bienvenida a la zona de estar, donde una escultural Babel y el aplique Singular aportan tenuidad a los encuentros distendidos.
Sobre la mesa de mármol y pie de madera de Heaps & Woods, una lámpara GT con pantalla de cinta verde enfoca el espacio de trabajo. Entre magníficas plantas y flores, los ingredientes principales de la marca, se presenta una muestra de sus productos. Suspendida para alumbrar esta bella exposición, Lámina, de formas sencillas y evidentes, defiende la efectividad de la luz reflejada.